¿Hacia dónde va la educación?

A lo largo del módulo de Empleabilidad hemos tratado en varias ocasiones cómo mejorar nuestra empleabilidad. En otras palabras, qué cualidades y habilidades debemos potenciar para entrar con el pie derecho en el mercado de trabajo.

El papel que desempeña el sistema educativo a la hora de hacernos personas “empleables” es crucial, y en los últimos años se ha estado poniendo en tela de juicio. El profesor Michel S. Roth, presidente de la Wesleyan University en Estados Unidos y autor del libro Beyond the University: Why Liberal Education Matters, es crítico al respecto.

 

Según Roth, la educación no es un medio, sino un fin en sí mismo. Si el objetivo del sistema educativo (y en particular de la educación superior), argumenta Roth, es meramente preparar a las personas para desempeñar un papel determinado en la cadena económica actual, las desigualdades de nuestra sociedad no solo prevalecerán, sino que aumentarán.

“El esfuerzo de hoy para limitar la educación superior”, dice Roth, “a una determinada clase de estudiantes o de restringir el plan de estudios a un itinerario instrumental es un grave error que deja de lado la profunda tradición de aprendizaje humanista. Bajo el pretexto de la practicidad se esconde la anticuada condescendencia elitista combinada con el deseo de proteger el actual status quo de la desigualdad.”

El debate está servido. ¿Cuál ha de ser el papel del sistema educativo? ¿Prepararnos para el futuro trabajo, o fomentar el conocimiento y la pasión por aprender? ¿Son incompatibles ambos objetivos?

____

Puedes leer el artículo completo del profesor Roth aquí

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *


*